Además del desbordamiento de las aguas putrefactas que contaminan el ambiente en las calles y avenidas de Valle de La Pascua, también abundan enormes huecos y bocas de visitas sin sus tapas. La avenida Rómulo Gallegos no escapa a esta problemática.
Franklin Rodríguez. CNP 17620. @franklinrodriguezvdlp
Circular por las calles y avenidas de Valle de La Pascua se ha convertido en un riesgo para conductores de vehículos y personas que transitan a pie, quienes también están obligados a soportar la pestilencia que proviene de las aguas cloacales que corren libremente a través de las vías urbanas, denunció Miguel Ángel Martínez, quien se desempeña como conductor de un taxi.
La avenida Rómulo Gallegos en casi todo su recorrido está convertida en un río de aguas servidas desde hace meses. Recientemente en los alrededores de la panadería Guárico, un vehículo cayó en uno de estos huecos, según pudo constatar el equipo periodístico de NOTIPASCUA.
En la calle El Corozo, a pocos metros del Club de Leones hay una fosa de más de dos metros de profundidad, mientras en la calle 4 de la urbanización Las Garcitas, la rejilla de una alcantarilla está colapsada, lo cual representa un riesgo para conductores y transeúntes, informaron vecinos.
José Machuca, vecino de esta ciudad, llamó la atención sobre lo que ocurre en la calle Orituco, entre Los Ilustres y la avenida Rómulo Gallegos, donde los carros circulan sobre las aceras, porque los conductores tratan de esquivar un inmenso hueco que tiene una data de varios años. Muchos son los llamados que se han hecho a las autoridades, sin embargo, la Alcaldía no ha resuelto el problema.
En la calle Las Flores entre la Retumbo y Camaleones hay otra boca de visita sin la tapa, lo que también es “un peligro”, dijo Leocenis Carpio, en referencia al riesgo para las personas que caminan por e lugar, entre éstas, muchos niños.
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