Entre los detenidos se encuentran funcionarios de Insopesca
Este jueves, el Fiscal general Tarek William Saab informó que fue desarticulado un grupo delictivo que traficaba aletas de tiburón en La Guaira.
En una transmisión en vivo por Venezolana de Televisión, Saab dijo que funcionarios de la GNB en conjunto con funcionarios del Ministerio de Ecosocialismo y del Ministerio para Pesca y Acuicultura identificaron a la banda delictiva, tras «verificar una solicitud de permiso de exportación de productos hidrobiológicos» de la empresa Distribuidora KRM.
«Al hacer la inspección se percataron de que se trataba de una carga de 860 kilos de aletas de tiburón de diferentes especies. Pretendían exportar de manera fraudulenta», precisó el fiscal desde la sede del Ministerio Público en Caracas.
En su alocución, afirmó que el caso está relacionado con una investigación que se venía desarrollando en la Fiscalía 89ª Nacional en Defensa Ambiental iniciada tras recibirse información oficial de la Autoridad Administrativa de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna Silvestre (CITES) de Hong Kong.
«Quiero dejar claro que el caso que estoy mencionando constituye un delito trasnacional», puntualizó.
Según Saab, el grupo criminal también había exportado caballitos de mar amparados presuntamente con un registro del CITES que presentaba irregularidades.
«El documento no cumplía con los formatos internacionales necesarios para este tipo de exportación», agregó.
Tras investigar el caso, el Ministerio Público comprobó la participación en varias exportaciones fraudulentas de la Distribuidora KRM, «empresa usada de fachada para pretender legalizar estos hechos delictivos que atentan contra los ecosistemas y la fauna marina del país».
«Para reunir 860 kilos de aletas de tiburón estas personas debieron sacrificar un aproximado de 900 tiburones de diferentes tallas», explicó el fiscal.
Para Saab, se trata de un delito internacional como es el tráfico ilegal de especies en peligro de extinción o amenazadas.
«Este cargamento de aletas de tiburón está valorado en el mercado internacional en unos 250 mil dólares».
El fiscal detalló que la banda fue desarticulada en La Guaira, como parte de las acciones emprendidas por el Ministerio Público, además el organismo determinó que dos funcionarios de Insopesca estaban vinculados al grupo delictivo.
«Se encargaban de otorgar los permisos irregulares, por ello se solicitó orden de aprehensión contra Francisco Pichardo, inspector adscrito a la Gerencia de Sanidad de Insopesca Caracas y Carlos Romero, jefe de Insopesca del Mercado Municipal de Coche», declaró.
Los antisociales fueron imputados por los delitos de «contrabando agravado, asociación para delinquir, pesca ilícita y uso indebido de instrumentos de identificación».
Por el caso, también fueron aprehendidos Moisés Echarry, Luis Capitillo y José Robaina; así como una medida cautelar para Gabriel McConlley.
Con información de El cooperante
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