Especial-
Notipascua.- Venezuela considerada uno de los países más peligrosos del mundo, ahora está llena de “megabandas”, peligrosas organizaciones criminales conformadas por 50 integrantes o más que han estado operando con impunidad y ejerciendo control diversos sectores de la población.
El nuevo fenómeno se está convirtiendo en un dolor de cabeza para el régimen de Nicolás Maduro, que en las últimas semanas se ha visto obligado a salir a combatir a las incipientes organizaciones, emprendiendo redadas bajo el curioso nombre de Operación Liberación del Pueblo (OLP), como el que se dio la semana pasada en la Cota 905.
Pero estas “megabandas” son hijas ilegítimas del régimen, concebidas bajo los efectos de iniciativas gubernamentales insensatas, la corrupción de funcionarios que les suministran armas de guerra y la impunidad que otorga una inexistente política de Estado para combatir el crimen, dijeron expertos consultados.
La organización comenzó como una pequeña banda de ladrones de vehículos en 2008. Los atracadores le quitaban las camionetas a los hacendados de Guárico y el sur de Aragua para luego exigir dinero por devolverlas. A la extorsión derivada del robo de automóviles se unió la aplicada contra los dueños de fincas, comercios y constructoras.
Desde los 16 años de edad, José Antonio Tovar Colina mejor conocido como “El Picure” inició sus andanzas en el mundo del hampa, destacando por actos delictivos como el cobro de vacuna a comerciantes y ganaderos en las adyacencias de las obras del Sistema Ferroviario Nacional en los estados Monagas, Anzoátegui, Guárico, Barinas, Cojedes y Portuguesa.
La banda con sede original en Guárico, recibió el más duro golpe policial desde su conformación en diciembre de 2013, cuando funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), GNB y del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) realizaron un operativo en el sector Concha de Mango de El Sombrero, y luego de 10 horas de enfrentamiento lograron ultimar a ocho de los 30 miembro del grupo delictivo.
El 14 de diciembre de 2013, el entonces ministro del Poder Popular para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez Torres, anunciaba el desmantelamiento de la banda “El Picure”, luego de un fuerte operativo policial en el sector El Sombrero, estado Guárico, donde murieron ocho de sus integrantes. Sin embargo, esa teoría se ha venido desvaneciendo en el tiempo. Este lunes se conoció de manera extraoficial, que dicha organización criminal se refuerza.
La banda de José Antonio Tovar Colina, mejor conocido como “El Picure” une sus fuerzas a “El Juvenal”, anteriormente rivales, desde este fin de semana limaron asperezas para ir de frente contra aquellos cuerpos policiales que quieran frenar sus andar. Como sucedió este domingo, cuando cuatro funcionarios resultaron heridos tras un ataque con granadas y armas largas a la sede de la Policía del estado Aragua, en la población de Barbacoas, perpetrado por los grupos hamponiles.
Con el fin de rescatar a tres de sus compañeros que fueron detenidos por el cuerpo policial en días pasados y se encontraban recluidos en las celdas de esta dependencia policial, llegaron al lugar arremetiendo contra la policía. Se maneja que fueron aproximadamente diez hombres los que participaron en el ataque que duró poco más de una hora. Los efectivos resistieron por más de media hora, hasta que pidieron refuerzos a otros organismos de seguridad.
Los delitos son incontables:
Los integrantes de la banda “El Picure” son acusados de diversos delitos, entre ellos de asesinar al inspector del Cicpc, Renny Mejías, de 35 años, a quien le quitaron la vida con un tiro de FAL en la cabeza. En julio, sometieron a la entonces viceministra para los Pueblos Indígenas, en el barrio Concha de Mango. En diversas ocasiones, los integrantes de este grupo delictivo han terminado fiestas de las poblaciones de Guárico.
En 2014, el grupo armado perpetró en las instalaciones de Pdvsa Gas, ubicada en San Juan de los Morros, donde se robaron diez camionetas Toyota y varios uniformes, las averiguaciones policiales determinaron que se trataba de la banda “El Picure”.
A los de “El Picure” los buscan intensamente por mantener azotados a vecinos de Guárico y Aragua.
La población está armada:
El presidente de la Comisión por la Revolución y Reforma Policial, y diputado a la Asamblea Nacional por el Psuv, Freddy Bernal, explicó en entrevista exclusiva para Caraotadigital.net que un total de 600 mil armas ilegales fueron destruidas en los últimos 3 años, el 90% fueron decomisadas a través de operativos especiales y un 10% producto de los talleres y reuniónes con bandas delictivas que abrieron paso al diálogo a través del Plan Desarme Voluntario, promovido por el Gobierno Nacional
“Yo no voy a cambiar mi pistola así por así, me tendrían que dar algo que yo no pudiera conseguir con ella”, fueron las palabras de Ronny Ramos alias “Ronita”, habitante del barrio San José de Petare y portador de un arma de fuego desde los 15 años.
Su Prieto Beretta, su mano derecha e incondicional compañera desde hace cinco años, es tan solo una de las millones de armas que circulan en Venezuela y de la cual no pretende desprenderse tan fácil, pese a los planes para combatir la violencia que se aprobaron por unanimidad dentro de la Ley Desarme en el año 2013.
Esta resolución de seguridad ciudadana tiene como objetivo minimizar las compras ilegales, disminuir el contrabando y distribución de armas de fuego en Venezuela. “Lo ideal es que en el país nadie tuviese armamento pero lamentablemente con el problema de la criminalidad que vivimos, es necesario que los ciudadanos porten armas de acuerdo a la ley”. expresó Freddy Bernal.
Por otra parte el diputado a la AN, Freddy Bernal, destacó los resultados que ha plasmado este código para la defensa civil:
-En el 2014 se han destruido 180 mil armas de fuego.
-En lo que va del año 2015 se han destruido 30 mil armas de fuego, lo que ha permitido de manera voluntaria destruir cierta cantidad de armamento en todo el país.
Proceso del marcaje de armas y municiones
“Se ha avanzado con un número importante de policías municipales y se está realizando el proceso del marcaje de toda la policía nacional, con el objetivo de generar mayor control del porte de armas”, explicó Bernal.
Esto con el objetivo de que al hacerse uso de un cartucho de forma irregular o se lleve a cabo una acción ilegal con un arma, los cuerpos de seguridad rápidamente podrán determinar el lote exacto o el origen en donde se le otorgó el armamento o las municiones. (Ramses Rojas/caraotadigital.net)
Bandas arremeten en redes sociales:
Las bandas que azotan las calles venezolanas han promovido el miedo y la inseguridad de los ciudadanos, sin embargo la población que se encuentra inmersa en las redes sociales no escapa de la inseguridad.
Los expertos en el área de la criminología aseguran que las personas que crean cuentas en Twitter o Facebook son víctimas de esta red de bandalos 2.0.
Carlos Nieto Palma, abogado y coordinador de la ONG “Una Ventana para la Libertad”, considera que esta situación no es novedosa, pues en las cárceles del país las grupos criminales tienen acceso a la tecnología.
Nieto Palma enfatiza que la comunicación entre los delincuentes y los funcionarios públicos y de seguridad demuestra el poder, control y conocimientos que tienen las bandas. “Ellos ya no tienen miedo, esto es una reproducción exacta de los que sucede en las cárceles pero en la calle, con más libertades”, afirmó.
El ex jefe de la División de Homicidios de la antigua Policía Técnica Judicial (PTJ), comisario Luis Godoy asegura hoy en día las los delincuentes que usan las redes sociales demostran su poder y han retado a las autoridades que, a en su opinión, han tenido un rol pasivo ante los actos delictivos.
“Supongamos que las personas que manejan el Twitter son delincuentes que amenazan a políticos, eso revela que la impunidad en el país ha llegado hasta el límite, lo que ha llevado a los antisociales a hacer lo que desean, a sabiendas de que no van a ser capturados”, precisa.
Godoy cree que si no hay autoridades que identifiquen a los malhechores y los coloquen a la orden de la Fiscalía, para ellos les es más fácil amenazar. “El Gobierno le sigue dando espacio a la delincuencia”, sostuvo.
Los expertos concuerdan en que las autoridades tienen las facultades para identificar a los criminales que usan las redes sociales para amedrentar.
“Sabemos que existen personas que han estado detenidas por informaciones que han escrito a través del Twitter. Estos administradores que pudieran estar trabajando encubiertos con la parte delictiva y amenazan a efectivos policiales y políticos ya deben estar identificados y tras las rejas”, subraya Godoy.
Apunta que otros entes, como el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), y la Dirección General de Contrainte- ligencia Militar (Dgci), también pueden actuar. (Diario 2001)
Mataron a niño:
La delincuencia no tiene límites, un niño de 9 años de edad fue la víctima en esta ocasión, lamentablemente perdió la vida en medio de una persecución por una presunta banda, en el estado Guárico.
Según la publicación de la periodista de suceso, Jenny Oropeza, el menor que se encontraba en la parte trasera de la camioneta Fortuner que conducía su padre desde el Sombrero hacia Dos Caminos, estado Guárico fue asesinado presuntamente por la Banda del Picure, este sábado a la 1:15 de la tarde.
El suceso ocurrió cuando fueron interceptados por una camioneta Fortuner Beige tripulada por cinco sujetos quienes portando armas largas le efectuaron múltiples disparos para que detuvieran la marcha, no obstante no se pararon y continuaron por lo que los sujetos también siguieron en la persecución.
Ante la desesperación de lo que sucedía, los familiares del niño se retornan hacia el Sombrero para tratar de ubicar alguna comisión policial pero los antisociales continuaron disparando por lo que lo perseguidos perdieron el control y se salieron de la vía quedando en un barranco, los delincuentes detuvieron la marcha y al acercarse a las víctimas observaron que en el asiento trasero estaba un niño mal herido por lo que decidieron irse del lugar.
Posteriormente el niño fue trasladado al CDI del Sombrero, pero ingresó sin signos vitales.
Juró vengarse:
El pasado domingo 5 de julio luego de un fuerte intercambio de fuego en los Poliaragua y la banda de El Picure, los uniformados capturaron a dos de los miembros del grupo delictivo y los trasladaron al Comando central, ésto desato la furia de El Picure, quien juró vengarse de los policías. Desde ese día la situación en Barbacoa sur de Aragua es de mucha angustia para la PA, en la acción policial fueron heridos dos policías.
Es un alivio cuando usted deja atrás una avenida cualquiera, con su cola perezosa y exasperante, y entra en la Cota Mil completamente despejada.
A un costado el Avila reverdeciendo después de las lluvias y allá abajo, a la derecha, la Sultana multicolor y tan quietita, pero que tantos dramas dolorosos encierra.
Por allí llevábamos unos cinco minutos rodando cuando el taxista, después de comentarle que esa vía se ha convertido en un frecuente “sitio de liberación”, como se dice en el argot policial, me suelta a boca é jarro:
Por cierto, ¿usted vio el “tuiter” que El Picure le mandó a Maduro? No tenía noticias de ello, a pesar de los centenares de horas que semanalmente paso pegado a la famosa red del pajarito. Pero lo que más me impresionó fue la certeza con la que el taxista me hizo mención del personaje de la crónica roja, dando por descontado que uno estaba al tanto de sus desmanes y fechorías, como en efecto.
La verdad que no, ni sabía que El Picure tuviera cuenta de tuiter. ¿Y qué le dijo? Ah, que si no va a arreglar este desastre (dijo otra palabra), él mismo va a venir a meterlo en cintura.
¿Cómo le parece?
Se necesita, se necesita. Es decir, se necesita que se ponga orden en este caos, pero no creo que necesariamente haya sido El Picure el de la amenaza.
Alguien puede inventar una cuenta de tuiter con ese nombre y escribir lo que le venga en gana.
Guardé silencio, también el taxista, un moreno cuarentón con la panza forcejeando con el volante. La vista se me fue detrás de un motorizado que pasó como a 140 sin casco, lo mismo que la patria hacia el abismo, y me quedé pensando en el hecho cierto de la gran notoriedad que ha alcanzado el jefe de la temible banda guariqueña.
Un tabloide, que ya mordió eso, le dedicó una portada, con la “inocente” pregunta: ¿mito o realidad? Pocos delincuentes han alcanzado en Venezuela tanta fama.
Ninguno, claro, como el temible “Petróleo Crudo” en la década de los cuarenta, quien después de muchas andanzas y fugas espectaculares (aunque sin túneles como la de El Chapo) terminó siendo convencido por el General Medina Angarita para que volviera al carril y hasta recibió el honor de que el Jefe del Estado fuera su padrino de boda.
Ni pensarlo en estos tiempos. Si Maduro no convence ni a las UBCH, cómo esperar que convenza a El Picure de que se regenere y que, en un supuesto, deje el concubinato.
Las propias autoridades le dan publicidad al siniestro récord de El Picure: según Bernal, quince homicidios directos, incluyendo 2 Cicpc, 3 GNB y 2 policías de Aragua. Y hacia él dirigen la Operación de Liberación del Pueblo (OLP), la etiqueta propagandista que para la revolución es tan importante como el operativo.
Sorprendente que sujeto con tanta ferocidad haya escogido el nombre de un manso roedor histricomorfo de la familia Dasyproctidae. Pero el taxista, más perspicaz me da casualmente la respuesta: ¿Usted lo ha visto en la foto? ¡Es igualito a un picure! Ese comentario lo reproduzco, claro, porque imagino que el susodicho, aunque comprara este periódico, anda a centenares de kilómetros de aquí. Si no, ni loco.
En casa compruebo dos cosas: que El Picure no aparece con tuiter y que efectivamente guarda un enorme parecido con el roedor. O sea que se ha podido apodar “El Agutí” o “El Ñeque” o “El Jochi” o como cualquiera de esos especímenes comedores de semillitas.
La realidad es menos fútil. El Picure con su poderoso arsenal ha convertido a Guárico y sus alrededores en una zona fuera del control del gobierno, como si de el Esequibo se tratara.
Quizá en los próximos días venga otro cruento choque entre la megabanda y la policía y se resuelva el diferendo.
En este espacio, ya lo vio, no está “Todo sobre El Picure”, como se anunció arriba, pero ese es otro aspecto. En este tipo de vendettas la prensa siempre encuentra la forma de atraer lectores. Acepten, pues, nuestras excusas por esta deformación profesional.
Mito o realidad:
A propósito de “El Picure”. No es la primera vez que los medios de comunicación han acudido (unas veces sin proponérselo) en auxilio de un gobierno, propagando noticias cuyos protagonistas terminan convirtiéndose en leyendas subterráneas. Desde “La Machaca” hasta los platillos voladores y los marcianos, han sido distintas las carnadas para distraer a la opinión pública. En el caso de los delincuentes ensalzados por los medios, sería interesante conocer la opinión de los psiquiatras acerca de por qué el pueblo, atendiendo a esas informaciones, convierte a los criminales en mitos. No es una entelequia que en las barriadas de la periferia, el terrorismo mediático ejerce una atracción casi mística sobre las masas. Desde tiempos ancestrales, a La Sayona o El Ahorcado les salió competencia en delincuentes acrisolados en altares con las más inverosímiles prácticas sincretistas. Es probable que en el futuro, el ánima de Rosalío Gamboa, el decapitado cuya cabeza fue expuesta por sus victimarios junto al busto de Francisco de Miranda en Pariaguán, sorprenda a más de un noctámbulo. A José Félix Ribas (como a otros patriotas) los realistas lo decapitaron para darle un escarmiento a sus seguidores. Todavía no se sabe a quién o a quiénes quieren “llamar al orden” los asesinos de Gamboa. ¿A quiénes favorecen estos “íconos” que como el descabezado o “El Picure” son explotados por los medios de comunicación? En el pasado hubo dos ejemplos que por mucho tiempo entretuvieron a la opinión pública y sirvieron, entre otras cosas, para amparar la ineptitud policial, que los usó para achacarles toda clase de delitos no resueltos. Ellos son “El Zurdo de Carache” y “El Negro Antonio”. El primero se hizo leyenda después de liquidar uno a uno a seis hombres a quienes acusó de ser los causantes de la muerte de un hermano. Como manera de que fueran “digeridos” por la ciudadanía, los medios se encargaron de darle un toque mágico al personaje haciéndolo aparecer y desaparecer de la manera más fantástica. La fama de “El Zurdo” trascendió las fronteras andinas, la apariencia de justiciero protector de los pobres, hizo que en las rancherías su fotografía luciera rodeada de velas y de aquellos glorificados por la creencia popular.
El otro delincuente iluminado fue Miguel Ángel Barrios, mejor conocido como “El Negro Antonio”, un singular espiritista a quien le atribuyeron muchas muertes y delitos, pero, igual, en su expediente figuraban incontables obras de caridad. En cualquier hecho de violencia no solventado salía a relucir “El Negro Antonio”. Cansado de evadir victoriosamente a las policías, Miguel Ángel Barrios (no se sabe si murió) comenzó a hacer sus “apariciones” y los creyentes terminaron levantándole un mausoleo en el Cementerio Municipal de Valencia. Hoy, quien ocupa los cintillos de las páginas rojas es José Antonio Tovar Colina, “El Picure”. Centenares de policías están tras su captura, lo cual no le impide que (según los medios) aparezca con originalidad en los sitios más distantes. Su vida delictiva engrosa un amplio prontuario. Cuando se escriba sobre las incidencias de ese absurdo llamado Zonas de Paz (áreas de despeje, donde los delincuentes recibieron recursos del Estado bajo la promesa de regenerarse) Tovar Colina, alías “El Picure”, por las andanzas que se le atribuyen es el adecuado protagonista. ¿Será “El Picure” una invención de la conseja popular, nacido en los medios de comunicación? ¿Quién es “El Picure”?. (Miguel Salazar)
Fuente: Reportero24.
Por: Gregorio Salazar
@goyosalazar
Javier Mayorca
El Pitazo/EFE
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