Cambia la cerradura de tu casa
De alguna manera, a todos nos ha pasado, al menos una vez en la vida. Ese mal momento en que llegas a casa o vas a salir y la cerradura te hecha una broma. La puerta principal no funciona bien. Imposible dejarla así hasta el otro día. O la llave no entra, o no gira completa o se desprendió el bombín o la llave se partió adentro. Es decir, que te llegó el momento de cambiar tu mismo la cerradura de la casa. A menos que dispongas de un dinerito extra y estés dispuesto a dárselo a tu cerrajero de confianza.
Aprende como cambiar la cerradura de tu casa
En realidad, no es complicado si conoces el procedimiento. También, resulta sencillo si tienes el profesionalismo y la experiencia de nuestros expertos de Cerrajería Barcelona. A veces, pensamos que colocar una cerradura es un procedimiento sencillo. Pero siempre hay que aplicar técnica y experiencia. Hoy, en nuestra página te daremos las indicaciones más generales para cambiar la cerradura de tu casa.
Antes que nada, debemos saber que herramientas debemos tener para realizar el cambio de cerradura. En tu caja de herramientas debe estar un destornillador estrella, o de estrías, la cerradura nueva y unos 20 a 30 minutos de paciencia.
Pasos a seguir en el cambio de una cerradura
Los pasos para cambiar la cerradura son muy sencillos:
- Desmonta la cerradura averiada. Así es como retiras los tornillos del frontal de la manivela con el destornillador de estrella.
- Sujetas firmemente la puerta, estiras la manivela y extraes cuando ya este floja.
- Desatornillas el tornillo lateral y liberas el bombín de la puerta. Si el caso no es que se partió la llave, puedes utilizar la propia llave y girarla para retirar el bombín de la puerta.
- Retira los tirafondos laterales de la cerradura con el destornillador de estrella.
- Por último, presiona con la mano o el destornillador la cerradura desde la parte interior de la puerta para poder retirarla.
Ahora, ya desmontada la cerradura averiada solo te queda colocar la cerradura nueva. Solo te queda seguir los mismos pasos a la inversa. En realidad es un procedimiento bastante sencillo. No tardas mucho tiempo en hacerlo. Y te ahorras un buen dinerito. Aunque no sería mala idea, mandar a chequear tu trabajo con un profesional que te certifique que quedó bien hecho.
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