Los consumidores que antes compraban a diario ahora lo hacen dos o tres veces por semana mientras que la cadena de comercialización deja mas perdidas que ganancias

23 de junio del 2017.- 

Carlos Sotillo.-

Valle de La Pascua||Guárico||Notipascua.- Ante la grave crisis que atraviesa el país, el venezolano promedio tiene que ingeniárselas para poder llevar los alimentos al hogar todos los días, esto aunado al aumento progresivo de la cesta básica y sobre todo a la escasez de dichos productos, que cuando se logran conseguir tienen precios excesivos que van en detrimento del bolsillo del consumidor.

Ante tal situación el precio de la carne de res en diferentes cortes se ha  incrementado al grado de que los consumidores que acostumbraban comprar carne toda la semana, ahora lo hacen muy pocas veces, lo que evidencia el deterioro de la calidad de vida de las familias que día a día tiene que recorrer diversos locales comerciales a los fines de adquirir los alimentos necesarios para su subsistencia.

Carlos Barrios, quienes encargado de una carnicería en la calle Los Ilustres con calle Providencia, explicó que el actual precio de la carne se tambalea entre lo justo e injusto, «El precio esta demasiado alto para el consumidor de acuerdo a los cortes, por ejemplo, la pulpa, pecho cuadrado ronda los once mil bolívares, el solomo, lomitó, punta y ganso esta por el orden de los trece mil bolívares el kilogramo;» dijo.

En cuanto al margen de ganancias, reseñó que arroja el 25 al 30%, «El problema radica en los insumos para mantener un negocio, comprar las cintas que sirven para cortar los huesos, las bolsas y el pago de los tres empleados, luz, alquiler y agua, le queda a uno de ganancia como el 10% y eso te queda para medio sobrevivir, eso era antes que se podía ahorrar y con la crisis económica y la hiperinflación que estamos  viviendo complica mas el poder adquisitivo de los consumidores,» sentenció.

Ederwis Colmenares, quien es el encargado de otro establecimiento de carne en el municipio Infante indico «compro la carne de res en canal en el matadero municipal al costo de 5.500 bolívares el kilogramo, esto es hablando el precio de la vaca, porque el toro lo venden en seis mil bolívares y uno comercializa a doce mil bolívares la carne de primera, siete mil la costilla y el hueso redondo, y aunado a la poca compra del producto cárnico es poca la ganancia que estamos devengando como comerciantes, ya que estos precios no son accesibles para el pueblo, podemos hablar que un cincuenta por ciento de la clientela es la que viene a comprar carne y es comprensible porque el que gana sueldo mínimo no le da para costear los gastos de la carne,» comentó.

Por su parte Jhonny Colmenares indicó que «algo que llama poderosamente la atención es que debido al precio del ganado muchos mayoristas adinerados vienen de otros estados del país a comprar y se llevan la mejor ganadería dejando que nosotros los carniceros locales tenemos que comprar vacas de segunda y a un alto costo y lo peor es que a diario suben el precio de la carne y esto encarece el bolsillo del consumidor» especificó.

Hablan los consumidores:

Alexander Pulido comentó que el precio de la carne de res no da para cubrir esta necesidad a diario, «El alto costo de la vida es tal que ahora si puedes compras carne o una vez a la semana o una vez al mes, el presupuesto familiar se ha reducido y el salario que gano lo que dan es ganas de llorar,» refirió.

Gustavo medina añadió que ahora se puede comprar carne de acuerdo al salario que tenga el ciudadano común, «Hay personas y familias que no tienen la capacidad para comprar un kilogramo de carne, hay quienes pueden darse ese lujo de comprar carne todos los días, y comerciantes que tienen como comprar al mayor, ya que tienen la capacidad económica, aún así ha bajado considerablemente el poder adquisitivo de los consumidores y quien tenga un salario mínimo solamente le quedara soñar con poder comprar un kilo de carne,» acotó.

Erimar Celis agregó que el actual precio de la carne no da para llevar un kilo diario, «Ahora con esta crisis que esta golpeando a todos los estratos sociales, mi bolsillo no da para comprar carne todos los días, a veces varío y vengo un día y otro no, en mi casa somos tres personas y yo acostumbraba a comprar carne todos los días, pero ahora compro dos o tres veces por semana y eso si se da la ocasión» finalizó diciendo.

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