Retenidos dos buses Yutong por pacientes renales en protesta

Urge instalación de Unidad de Diálisis en Valle de la Pascua

Freddy Arveláez Gàmez

Desafortunadamente prosigue en caldo de cultivo la lucha de Pueblo contra pueblo; los reclamos e insultos proliferaron y a punto de pugilato estuvo la situación entre usuarios y pacientes renales, en hecho suscitado durante la mañana del viernes 10 de mayo, frente a la oficina de Bus Guárico en Valle de la Pascua.

Entre tanto, cada vez se hace mas imprescindible la puesta en funcionamiento de la Unidad de Diálisis en el Hospital Zonal Rafael Zamora Arévalo de la capital del municipio Leonardo Infante. 

En realidad poco faltó para que se fueran a las manos varios usuarios descontentos con algunas personas enfermas que protestaron por la no comparecencia oportuna del bus que los traslada hacia Calabozo, en procura de cumplir la rutina con el tratamiento de hemodiálisis.

Ante la tardanza del bus habilitado, los pacientes desesperados se atrevieron a caminar desde las afueras del centro hospitalario hasta el edificio de la prefectura donde funciona la oficina del transporte con intenciones de reclamar ante la coordinación respectiva, pero al no encontrar respuesta procedieron a retener las unidades urbanas que cubren las rutas Villa del Sol y El Palmar. 

Así las cosas, el agua retomó el cauce normal cuando cercano a las 11 a.m. apareció el anhelado vehículo, presuntamente venía de trasladar personas para una actividad en El Sombrero. Lo cierto del caso es que los pacientes renales del HZRZA, distribuidos en dos grupos de 19 personas cada uno, nuevamente encuentran inconvenientes que ponen en riesgo sus vidas, ante lo cual reclaman el pronto funcionamiento de la Unidad de Hemodiàlisis en Valle de la Pascua. 

Solicitan mejor servicio de transporte Ciria Rangel es una de las pacientes que requieren tratamiento dializador desde hace 7 años y dijo que la obra civil es de primer orden y está lista desde noviembre del 2018, pero se requiere la dotación de las máquinas e insumos para alimentar las esperanzas de vida; «ahora vinieron unos técnicos que ocasionaron daños a la planta de ósmosis, mientras tanto  solicitamos mejor servicio de transporte hacia el hospital Rafael Urdaneta de Calabozo, donde prestan un servicio extraordinario pero el viaje tres veces a la semana es extenuante para pacientes y familiares».

Definitivamente, entre la vida y la muerte se siguen debatiendo los pacientes renales, aunque se aferran a su esperanza de vida y por ello exigen la puesta en servicio de la nueva Unidad de Diálisis de Valle de la Pascua.

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