Apenas surten el tanque a 2 vehículos por línea. Representantes desmienten bachaqueo de gasolina.
Franklin Rodríguez CNP 17620
La falta de combustible es lo que impide al transporte público salir a las calles de Valle de La Pascua con todas sus unidades, ya que de un total de de 58 disponibles, solo surten dos cada diez días, informaron representantes de las líneas urbanas,quienes desmintieron estar bachaqueando el carburante y aseguraron que de ochenta litros que les eran suministrados al inicio del actual esquema de venta del producto, ahora solo pueden abastecer cuarenta litros por cada vehículo.
Al comienzo el suministro era de 80 litros a las busetas y 70 a las camionetas, después lo disminuyeron a 60 y 50 y, hace dos días lo redujeron a 40 y 40.
En tal sentido, Wilder Ortega, representante de la línea Turpial que cubre la ruta Las Garcitas, Jardín La Pascua, Terrazas del Lido, explicó que antes sus 18 unidades hacían el recorrido movilizando entre treinta y cuarenta pasajeros cada una, con un promedio de seiscientas. “Ahora, por la falta de gasolina solo contamos con dos unidades haciendo ese mismo recorrido y transportando cuarenta personas, porque no podemos llevar pasajeros de pie”.
Ortega fue enfático al asegurar que los vehículos de las diferentes líneas están operativos y dispuestos a cumplir con su misión de servir a la población que en este momento en su mayoría anda a pie, “lo que no hay es gasolina para poner a circular todas las unidades”, expresó.
Por su parte, Francisco Díaz, de la línea Máster, que recorre la ruta Hospital La Represa, manifestó que de seis vehículos que tienen disponibles, solamente dos salen a las labores de transporte, “los demás se quedan estacionados por falta de gasolina”.
Díaz desmintió la matriz de opinión existente en la colectividad vallepascuense sobre una supuesta venta de gasolina por parte de los conductores de las rutas urbanas y aseguró que eso no es posible, ya que al recibir el suministro salen a realizar su trabajo que es fiscalizado por la Alcaldía del municipio Leonardo Infante, a través de un supervisor ubicado en la parada Trigo dorado, quien toma nota de las horas de salida y las vueltas que hace cada vehículo que al terminar la jornada de trabajo tiene que ir hasta el terminal de pasajeros para ser desinfectado, en cumplimiento de las normas contra el Coronavirus. “Conductor que no cumple simplemente es suspendido”.
Es bueno que la gente sepa que un vehículo gasta diez litros de gasolina en cada vuelta. Eso significa que cuarenta litros alcanza para tres recorridos, ya que debemos dejar diez litros para ir a la bomba cuando nos llamen de nuevo para el suministro, porque de lo contrario tendríamos que llevar los carros en gruas, argumentó.
Dionisio Mayorga, de la línea Gran Cacique, agregó que la mayoría de las busetas que se observan en las estaciones de servicio cuando llega combustible, son de las líneas que viajan entre Valle de La Pascua y otros municipios, no de las urbanas. Igualmente dio a conocer que de las catorce unidades que circulan en esta localidad, dos prestan servicio hacia la comunidad de Corozal y las otras 12 son las que sirven a Valle de La Pascua.
Finalmente, los dirigentes del transporte, quienes estuvieron acompañados por Yudith Alvarez de la línea La Concordia y Manuel Hernández de la Bicentenario, tras reconocer el apoyo que les han prestado la concejala Zayret Hernández y la directora de Transporte de la Alcaldía, solicitan a las autoridades estudiar la situación que están atravesando y apoyar con el suministro adecuado del carburante para poder movilizar la flota de vehículos que está técnicamente paralizada.
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