La fórmula ganadora de Alex Espargaró: su madurez.
Aleix Espargaró ha repetido este mantra y ha ganado varios premios: Ten paciencia, vendrán carreras fuera de Europa y pasarán cosas. Un piloto que está asombrando en el actual Mundial de MotoGP y que cuenta con opciones de subirse a lo más alto del podio a final de curso según las apuestas online.
Su compañero, Maverick Viñales, lo secundó. Y, en términos generales, todos en Aprilia lo hacen. ¿Por qué? Porque creen que la experiencia en circuitos de Asia y Oceanía será un importante, y el de Granollers tiene en eso una ventaja.
A menudo, la madurez se asocia erróneamente con la edad, que está lejos de la forma corporal óptima. Sin embargo, la definición de la RAE es bien distinta: «Período de la vida en que se ha alcanzado la plenitud vital y aún no se ha llegado a la vejez».
La fábrica de Noale confirmó que Aleix, de 33 años, está en forma. Allí creen que ha aprendido la sabiduría que hizo en Motorland y hará lo que le falta, digamos ahora o cuando esté más arriba, a 17 puntos de distancia.
Massimo Rivera, CEO de Aprilia Racing, así lo cree, y así lo comenta: «No ha cambiado mucho para nosotros. Nuestro espíritu, nuestra forma de trabajar, no ha cambiado desde el comienzo de la temporada. Sabemos que tenemos algunas oportunidades, sabemos que no somos los más fuertes, pero sabemos que, si hacemos todo a la perfección todos los días, podemos jugar. Así que el objetivo es siempre el mismo: no tanto ganar, sino ser perfecto todos los días.
Si tenemos éxito, podemos obtener un buen resultado. Todavía queremos mejorar la moto. Aleix está en un momento de forma increíble y se merece estos resultados porque su madurez me hace creer que fue el mejor del circuito de Aragón.
No hay duda de que los números avalan su visión. Aleix suma 296 carreras en campeonatos del mundo y 20.970 km solo en MotoGP. Ha sumado su 18º temporada completa y, lo más importante, en Motegi, por ejemplo, ha corrido 14 veces, 9 de las cuales han sido al máximo nivel. Con Suzuki, terminó cuarto en 2016, que es su mejor resultado.
Comparado con las «únicas» 133 apariciones de Quartararo en la Copa del Mundo, con sólo cuatro carreras en Japón, una de las cuales fue en el máximo desplazamiento, en 2019, terminando segundo detrás de Marc Márquez, Espargaró parece tener una clara ventaja.
Ganó Moto2 con Boscoscuro en 2018 pero fue descalificado por la presión de los neumáticos.
Por su parte, Pecco Bagnaia ha corrido 167 veces y realizado siete viajes al País del Sol Naciente, pero solo una vez en MotoGP. Ahí terminó 13º con la Ducati Pramac de 2019. Ganó Moto2 en 2018 por las sanciones a Fabio.
Otro rival, Enea Bastianini, que ha corrido 154 veces en el Mundial, nunca ha estado en MotoGP en Motegi, pero sí lo ha hecho en otras categorías seis veces. Ganó Moto3 en 2016.
Entonces, en Aprilia dijeron que no deberían fijarse en los problemas que tienen en Ducati para sacar ventaja, como lo explica Rivera: «Sí, pero creo que solo podemos mirarnos a nosotros mismos y hacer todo lo posible. En cuanto a lo que va a pasar en el futuro… debemos tratar de ser líderes. No va a cambiar la forma en que jugamos».
Pero, a diferencia del escéptico Alex, el mandamás sabe bien a qué piloto hay que vigilar:
«¿Quién creo que es el más peligroso? Peco, Peco, no Fabio. Creo que, para él, perder es más difícil que ganar, digámoslo de esta manera».
Así, se viene un cierre de temporada que seguramente nos regalará muchas emociones, puesto que las tensiones ya están ahí. La lucha por el campeonato permanece muy cerrada, y cualquier cosa puede poner el título en manos de cualquiera de los contendientes.
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