¡Bienvenidos a nuestra sección de viajes! En esta ocasión, os llevaré a conocer Marrakech, una ciudad llena de historia, cultura y arte. En Marrakech, tendrán la oportunidad de sumergirse en la rica tradición del pueblo marroquí y explorar lugares icónicos que reflejan su patrimonio cultural. Para abrir boca tenemos esta imprescindible lista de algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad, desde la majestuosa Bab Agnaou hasta la impresionante Sinagoga de Lazama. ¡Acompáñame en este viaje por Marrakech!
Marrakech es una de las ciudades más bonitas de Africa, los palacios y zocos te dejarán enamorada. Para disfrutar de los siguientes lugares emblemáticos de Marrakech, no hace falta que tu viaje sea cultural. La belleza que esconde cada rincón de la ciudad te dejará con la boca abierta y muchas ganas de volver.
Marrakech respira aire mediterráneo y me recuerda en algunos momentos a la Ibiza de hace unos años. A diferencia de las Islas Baleares, para recorrer Marrakech no es imprescindible alquilar un coche. Como vimos en nuestro viaje a la isla blanca, la mejor opción fue el alquiler de coche en Ibiza. Bueno, esto solo era un apunte, porque si solo te quedas en esta ciudad de Marruecos, la podrás visitar a pie y en taxi.
Que ver en Marrakech
Dejamé que te muestre algunos lugares de interés en Marrakech y luego daremos un paseo por la ciudad:
- Bab Agnaou: una de las puertas más antiguas y más impresionantes de Marrakech. Construida en el siglo XII, esta puerta monumental da acceso al Palacio Real.
- Tumbas Saadíes: un mausoleo histórico que data del siglo XVI y que contiene las tumbas de los sultanes Saadíes y sus familias. Este lugar es conocido por su hermosa arquitectura y jardines.
- Place des Ferblantiers: una plaza vibrante y animada que se encuentra en el corazón de la medina. Aquí encontrarán una gran cantidad de artesanías y productos locales.
- Palacio El Badi: un antiguo palacio construido en el siglo XVI por el sultán Ahmad al-Mansur. Aunque gran parte del palacio está en ruinas, todavía se puede apreciar su majestuosidad y belleza.
- El Mellah: el barrio judío de Marrakech, que data del siglo XVI. Aquí encontrarán la Sinagoga de Lazama, el Cementerio Judío y otros lugares históricos.
- Lazama: una hermosa sinagoga que data del siglo XVI y que es considerada uno de los monumentos judíos más importantes de Marruecos.
- Miâara: una madrasa (escuela coránica) construida en el siglo XIV. Este lugar es conocido por su impresionante arquitectura y mosaicos.
- Sinagoga de Cementerio judío: un cementerio judío que data del siglo XVI y que contiene las tumbas de muchas figuras importantes de la comunidad judía de Marrakech.
- Dar Si Said: un museo que muestra la cultura y el arte marroquí. Aquí encontrarán una amplia colección de objetos de cerámica, joyas, textiles y otros objetos de arte.
- Calle Riad Zitoun el Jedid: una calle famosa por sus restaurantes, cafés y tiendas. Aquí encontrarán algunos de los mejores restaurantes de Marrakech.
- Hammam Ziani: un hammam (baño público) tradicional que ha estado en funcionamiento durante más de 400 años. Aquí podrán relajarse y disfrutar de los beneficios del hammam marroquí.
Estos son solo algunos de los lugares que no te puedes perder en Marrakech. La ciudad está llena de tesoros culturales y artísticos que merecen ser explorados. ¡Así que no esperes más y ven a descubrir conmigo, esta maravillosa ciudad!
Plaza de Ferblantiers: Arte y gastronomía en Marrakech
Empecemos por la Place des Ferblantiers, donde hay un par de restaurantes recomendables. En los alrededores de la Plaza des Ferblantiers, los artesanos trabajan el latón y la hojalata para dar forma a todo tipo de objetos. Todo lo que nos rodea es fruto del trabajo manual que los artesanos realizan a la vista de los turistas. Pero vamos primero a tomar un café. El primero de los restaurantes es el café-restaurante Maryland, donde sirven un delicioso tajine de conejo con pasas y limón, tanto en el interior como en las mesas del exterior, a muy buen precio. El otro es el Koysbar, en el número 47 de la misma plaza, donde la cocina es más elaborada y la cuenta más elevada, pero donde merece la pena probar el strudel de berenjenas con albahaca o los profiteroles de conejo con mejorana.
El Mellah y la Sinagoga de Lazama: Una mirada a la historia
El Mellah, el barrio judío queda junto a la Place des Ferblantiers. Data del siglo XVI, cuando la comunidad judía de Marrakech era muy numerosa; en la actualidad sus calles están habitadas casi enteramente por musulmanes. Es una de las zonas más deprimidas de la ciudad, con lo que conviene ser precavido al visitarla. De camino a la calle Derb Ragraga, donde se encuentra la sinagoga de Lazama (consulta los horarios de apertura), se cruzan talleres artesanales y tiendas variopintas. La sinagoga de Lazama ha sobrevivido al tiempo y todavía está en uso. Más al este aparece el cementerio judío Miâara, si puedes acercaté.
Dar Si Said y el Museo de las Artes Marroquíes: Arte y arquitectura tradicional
Al salir del barrio del Mellah hay que subir por la calle Riad Zitoun el Jedid hasta llegar a la calle Derb Si Said para visitar Dar Si Said,. En el interior del palacio podemos disfrutar de refrescantes patios en los que crecen limoneros, palmeras y flores, y que hablan del arte de la buena vida alcanzado por la arquitectura tradicional marroquí. Dar Si Said es también la sede del Museo de las Artes Marroquíes, que reúne una interesante colección etnográfica en la que figuran muebles, puertas bereberes, marcos de ventana y palanquines de boda de los siglos XVIII y XIX, junto a una buena muestra de alfombras, tejidos, joyas de plata y azulejos de las regiones del sur.
La verdad es que una no se cansa de recorrer sus calles repletas de vida y color. Un bonito contraste con la cultura moderna europea, basada en ciudades cosmopolitas.
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