Debido al alto costo en charcuterías a los venezolanos y en especifico a los vallepascuenses se les olvidó el sabor del jamón y queso amarillo. Sólo tienen opciones de ingerir granos ya que suelen ser más accesibles al bolsillo.

Los precios en la charcutería están por las nubes. Muy difícil de alcanzar por el venezolano de a pie.

Grupo Notipascua.-

Valle de la Pascua.- Don «frijolote» como se escucha en las calles ya es el plato nuestro de cada día y a pesar de las proteínas que le aporta a nuestro organismo los habitantes reiteran que ahora es mucho mas difícil adquirir el alimento diario.

Y es que al momento de salir a comprar los alimentos se activa la desesperación y el «dolorcito de cabeza», ya que los costos cada día son mas elevados y no existe un control por parte de los entes competentes.

Consumir «arepita rellena con jamón y queso» quedo en el olvido o como dicen los lugareños «ya paso de moda», debido a que los precios de estos rublos en el ultimo mes ha subido vertiginosamente llegando a costar un kilo de jamón hasta 5000 Bs.S (5 millones de bolívares).

Para este año 2018 realizar ese tipo de desayunos o cena supera el sueldo mínimo a parte de arriesgar una semana de alimentación. Este medio reporteril realizó un recorrido por diferentes supermercados, comerciantes ambulantes y charcutería para conocer la realidad en torno a el consumo de alimentos charcuteros y además de saber con que se están alimentando los infantino.

La mortadela de carne tiene un costo entre 2800 y 3300 bolívares soberanos, la de pollo entre 3000 y 4300 bolívares soberanos, mientras que el jamón de espalda 4000 bolívares soberanos, pierna 5300 bolívares soberanos, pavo 5300 bolívares soberanos y fiambre 3800 bolívares soberanos. Mientras que el queso pecorino tiene un costo de 5300 bolívares soberanos, queso parmesano 6.300 bolívares soberanos, queso mozzarella 3500 bolívares soberanos y queso amarillo en 4900 bolívares soberanos.

Comerciantes decidieron cambiar de rubro a vender. Ahora por charcutería venden huevos, frijoles y queso.

Es de mencionar que los cambios de rutina alimenticia motivó a investigar un poco acerca de los alimentos que los guariqueños sustituyeron y en el mismo paseo se constató que los frijoles tienen un costo de 300 bolívares el kilogramo en efectivo y en 800 bolívares pagados por punto de venta, mientras que la yuca esta en 250 bolívares el kilogramo. Algunos también optan por cocinar picadillos de berenjena que tienen un precio de 150 bolívares el kg.

¿Qué pasa con las bebidas refrescantes?

La costumbre de beber refrescos cayo vertiginosamente y es que un gran porcentaje de la población dejó de consumir este tipo de bebidas ya que tienen un costo elevado. Se presenció que el refresco de 2 litros supera los mil bolívares soberanos. Ante esto residentes han optado por comprar frutas como lechosa que tienen un costo de 60 bolívares el kg, piña en 450 bolívares, pero existe otro inconveniente, la azúcar para endulzar los jugos tienen un costo entre 350 en efectivo y 1000 bolívares en punto de venta.

El consumo de refrescos a disminuido considerablemente debido al alto costo

¿Que opinan los consumidores?

Pedro García, habitante del municipio Infante indicó, “ya no se puede comprar queso amarillo ni jamón de ningún tipo, puesto que el dinero no es suficiente para darse esos lujos, ahora todo es un mundo de billetes, es tanto así que el queso blanco se encuentra en 2 millones y es difícil de adquirir mientras que uno de dirige a charcuterías y comprar 500 bolívares de mortadela se va completica en una cena. Ante lo ocurrido venezolanos nos alimentamos cada día peor y sólo comemos frijol ya que un kilo de arroz también esta carisimo”.

Pedro García “ya no se puede comprar queso amarillo ni jamón de ningún tipo”

Otro de los consumidores encuestados fue Gabriel Rodríguez quien reitero “por los momentos nos encontramos comiendo arepa de maíz trillado ya que es lo único que se consigue y de vez en cuando compro un poquito de jamón y queso pero ya en los establecimientos no dan bolsa puesto que se encuentra escasas. La verdad es que el venezolano se encuentra pasando trabajo en cuanto a los alimentos todo traspasa el millón de bolívares”.

Gabriel Rodríguez “Por los momentos nos encontramos comiendo arepa de maíz trillado”

Por su parte José Belisario expresó “tengo días sin comer jamón sólo un beso que recibí ayer (sonrió), el venezolano se encuentra comiendo poco y si come una vez al día es mucho. Para alimentarse lo más económico que se podía conseguir en comercios era el kilo de frijoles pero ya están en 400 bolívares, un kilo de arroz se encuentra en mil bolívares soberanos, mientras que el kilo de pasta súpera los dos mil bolívares. ¡Imagínate!”.

Jesús Herrade indicó “en cuanto a charcutería ya nos olvidamos que es eso, los pascuenses nos encontramos es haciendo milagro con los alimentos, y lo que se ésta consumiendo a menudo son granos ya que se encuentran un poquito bajo precio, pero es un beneficio ya que al comprar granos se hace una hoya y rinde 2 o 3 días, mientras que si se compra un kilo de carne rinde sólo un día”.

Jesús Herrade “En cuanto a charcutería ya nos olvidamos que es eso”

¿Qué opinan charcuteros?

También quisimos saber la opinión de los charcuteros y entrevistamos a Francisco Zamora, quien tiene un establecimiento en la avenida Romulo Gallegos de Valle de la Pascua, reiterando “anteriormente éste local era una charcutería pero debido al alto costo del producto se decidió dejar de vender jamón, queso, u otros rubros para comenzar a vender granos, huevos y queso llanero, puesto que estos alimentos son buscados a menudo por residentes de la localidad ya que el precio disminuye a comparación de otros de la cesta básica”.

Francisco Zamora, “anteriormente éste local era una charcutería pero decidimos vender granos y huevos ya que no daba”

Para finalizar José Ruiz “normalmente nos vemos en la obligación de subir los precios de la charcutería ya que las facturas que nos llegan cada semana son con precios nuevos y las personas ya no visitan estos establecimientos como anteriormente, que solían hacer colas y colas, en algunas ocasiones compran un poquito de jamón y queso amarillo pero eso es raro”.