Quedó con muerte cerebral y les fue retirados los aparatos que la mantenían con vida
Los familiares de Kennya González Ojeda tomaron la decisión de donar los órganos de la venezolana para seguir su legado de ayuda a otras personas
Estados Unidos// Notipascua.com//
Kennya González Ojeda de 32 años, desde hacía dos, residía en Los Estados Unidos, era natural de Valencia, egresada en Educación, mención inglés, en la Universidad de Carabobo. Desde su llegada a Estados Unidos, González residió en Cape Coral donde trabajó como camarera en un restaurante y recientemente había comenzado en una oficina de seguros, donde estaba ansiosa de mejorar su inglés para poder dedicarse luego a trabajo social para niños.
Se fue del país en busca de futuro y oportunidades laborales, se unió a los más de dos millones de venezolanos que han decidido hacer maletas y buscar un mejor futuro en otros horizontes. A las 3:40 p.m. del pasado jueves, la venezolana conducía por la carretera, cuando un Ford Mustand blanco del año perdió el control y comenzó a girar en los carriles en sentido al oeste, cruzó la separación de la vía, voló del impacto y se estrelló contra su Toyota Prius azul.
Al momento del accidente, González iba camino a la casa de los padres de su pareja para celebrar la cena de Acción de Gracias. La pareja tenía seis meses de noviazgo, tras haberse conocido en los pasillos de un supermercado
Murió en un hospital de la Florida, el Lee Memorial en Fort Myers el Día de Acción de Gracias con una hemorragia interna y huesos fracturados en todo su cuerpo tras el accidente que podría haber sido provocado por un conductor con un historial de multas de tránsito y que estaba en libertad condicional por un caso de violencia doméstica.
Para pagar por el tratamiento y el traslado de algunos familiares a Estados Unidos, se organizó una campaña de recolección de fondos. La campaña fue iniciada por su primo y ha acumulado $14,085 de 276 personas en solo cuatro días. Las donaciones serán ahora utilizadas para cubrir los gastos de los servicios fúnebres, los cuales no han sido todavía anunciados. Su familia inmediata, como la mamá y sus hermanos, viven en Venezuela y algunos ni siquiera tienen visa de inmigración, pero ya la mamá llegó a USA y esta al lado de su hija muerta.
Kennya fue declarada con muerte cerebral por los médicos y estaba respirando con la ayuda de máquinas especializadas. El martes la desconectaron de los dispositivos.
“Se nos fue”, lamentó su novio Vince Moore, que estuvo con ella hasta el final.
.Aficionada a los viajes, la venezolana había aprovechado para conocer varios rincones del país, como San Francisco, Los Ángeles, Las Vegas, Nueva York. Recientemente había ido al Gran Cañón de Colorado.
Los familiares de González tomaron la decisión de donar los órganos de la venezolana para seguir su legado de ayuda a otras personas.
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