Notipascua.-Aunque nos lata el corazón, sin cerebro estaríamos muertos en vida. Este pequeño órgano que a lo sumo pesa kilo y medio, y apenas constituye el 2% de la masa corporal, es el que nos rige la existencia porque controla nuestros pensamientos, emociones y acciones.
El cerebro necesita una provisión constante de oxígeno y glucosa para crear la fuente de energía que garantiza un óptimo desempeño. Cuando la inyección de oxígeno no es suficiente, los efectos son sencillamente devastadores.
De todo el oxígeno que necesita el organismo para funcionar, el cerebro consume alrededor del 20%. Basta que disminuya el flujo de oxígeno para que se manifiesten síntomas de alerta neurológica, y hasta la muerte cuando este elemento químico se ausenta por varios minutos.
QUÉ ES HIPOXIA CEREBRAL
Inhalación de humo, traumatismo craneal, asfixia, intoxicación por monóxido de carbono, ahogamiento, sobredosis de drogas, accidentes cerebrovasculares y estrangulación son algunas de las causas de la Hipoxia Cerebral o deficiencia de oxígeno en el cerebro.
Si la Hipoxia Cerebral es leve, el paciente no es capaz de concentrarse en las tareas, le cuesta tomar decisiones acertadas y le falla la coordinación motora. Cuando la condición es severa, la persona no reacciona y cae en coma, deja de respirar y no responde ante el estímulo de la luz.
Si después de este tipo de evento el paciente solo respira, y presenta presión arterial y ritmo cardíaco, es probable que el diagnóstico sea muerte cerebral.
COMPLICACIONES ASOCIADAS
Una persona que entre en estado vegetativo está muerta en vida. Si por fortuna no se llega a esta condición, la privación de oxígeno podría generar úlceras por presión, neumonía y el desarrollo de coágulos en las venas. Veamos otras complicaciones de la Hipoxia Cerebral:
1-CAMBIOS EN LA CONDUCTA
Como el cerebro controla pensamientos, emociones y acciones, una persona intoxicada con monóxido de carbono, por ejemplo, modifica su forma de ser manifestando letargo, pérdida de interés y dificultad de responder adecuadamente a los estímulos.
2-PÉRDIDA DE CONCIENCIA
Basta un corto período de tiempo sin oxígeno para apagar el cerebro y provocar la pérdida de la conciencia. Pueden ser segundos o minutos, pero al final todo aquel que sea privado de oxígeno, desmayará. Y aunque no se produzca muerte cerebral, la insuficiencia de oxígeno puede conducir a un coma permanente o a un estado vegetativo persistente.
3-DETERIORO DE LA MEMORIA
El tejido cerebral no se regenera. Por eso, cuando la falta de oxígeno progresa y el tejido muere, el cerebro se torna incapaz de crear memorias y almacenar recuerdos. Eso también explica el por qué las personas que sobreviven a un evento de asfixia, intoxicación con monóxido de carbono o a un fuerte golpe en la cabeza, son incapaces de recordar el accidente.
CLAVES PARA OXIGENAR EL CEREBRO
Aunque la Naturaleza es muy sabia, nunca está de sobra darle una manito para ayudar al cerebro a funcionar perfectamente, asegurándole el aporte de oxígeno que necesita cada día.
1-APRENDE A RESPIRAR
La vida sedentaria y los accidentes traumáticos son en ocasiones los factores responsables de una respiración superficial. Sin embargo, para proveer al cerebro del oxígeno necesario hay que aprender a respirar profundamente.
2-EJERCÍTATE A DIARIO
Mover el esqueleto incrementa el flujo sanguíneo, condición fundamental para oxigenar el organismo. La rutina de ejercicio físico debe ser la adecuada al estado de salud de la persona.
3-CONSUME HIERRO
Es importante agregar a la dieta diaria alimentos ricos en hierro, pues este mineral es esencial para oxigenar el cerebro. Además, el exceso de hierro se elimina a través de las heces fecales.
4-SUPLEMENTOS VITAMÍNICOS
Estudios de la Universidad de Medicina Hebei y del Centro de Medicina de la Universidad de Indiana, Estados Unidos, han demostrado que el Ginkgo biloba aumenta el flujo sanguíneo y, por lo tanto, el nivel de oxígeno que llega al cerebro.
Fuente:Dominical
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