Las madres de los privados de libertad aseguraron además que temen que Politáchira no le haga llegar a sus hijos la comida que le envían.
19 de Octubre del 2016.
Notipascua.-
El pasado 7 de octubre finalizó el motín que se mantuvo por al menos un mes en la Policía del Táchira donde los privados de libertad fueron obligados a consumir carne de los presos asesinados.
Cuando terminó el motín, 16 reclusos fueron trasladados hasta Tocuyito, dos están desparecidos presuntamente porque fueron asesinados y comidos por los demás presos y los demás privados de libertad que se quedaron en el comando de la policía no han recibido la atención médica que los familiares aseguran que necesitan.
Según los testimonios de los rehenes y los presos, muchos reos fueron golpeados y lesionados por negarse a comer carne humana y aunque los familiares de ellos han intentado pedir que reciban la atención médica necesaria, no lo han logrado.
“Yo supe por unos policías que mi hijo tiene un brazo fracturado, que a él le pegaron con martillos en los brazos y los dedos porque ‘El Grillo’, que era quien comandaba el motín, se molestó porque él no quiso comerse la carne de los muchachos que mataron” narró Evarista Chacón, madre de un preso.
Ella, en su desesperación, llevó una carta al tribunal y a la directiva de Politáchira para pedir que su hijo pueda ser atendido ante la lesión que sufrió en el motín. “Hay muchos de ellos heridos, los que no querían comerse la carne de los chamos eran golpeados pero no con puños o patadas, sino con martillos, contra las paredes o con un ladrillo que ellos tenían ahí” explicó Chacón.
Desde que terminó el motín los familiares no han recibido información oficial sobre lo que pasó, sobre cómo están sus seres queridos o si son ciertos o no los rumores que están golpeados y heridos.
“Yo pido justicia y ayuda. Temo por la vida de mi hijo y temo por mi vida por dar estas declaraciones, pero yo necesito que alguien me escuche y me ayude porque mi hijo está herido y necesita esta radiografía en el brazo y tomar medicinas para prevenir infecciones y calmarle los dolores” pidió con lágrimas Chacón.
También con ella se encontraban otras madres quienes prefieron no identificarse por miedo a represalias contra sus hijos denunciaron la misma situación, pues no han podido visitarlos ni comprobar el estado en que se encuentran.
“Aquí los que empezaron el motín fueron los únicos que se salvaron porque los trasladaron, los demás se quedaron aquí, golpeados, maltratados y olvidados por las autoridades porque los tratan mal. La comida que les traemos no se las dan y esto es algo que se ha denunciado muchas veces” dijo una señora en Politáchira.
Otra aseguró que su hijo tiene tres dedos partidos y no ha sido atendido por médicos. “Él me envió un mensaje a los dos días que terminó el motín y me dijo que textualmente ‘má, me voltearon tres dedos y los tengo partidos, estoy bien, pide ayuda porque perderé mis dedos’ y yo eso se lo dije a un supervisor y no me prestó atención”
Las demás madres y familiares allí denunciaron que a diario llevan alimentos que temen no son entregados por las informaciones que les han dado.
Al respecto, el director de Politáchira, Amador Torres indicó que es falso que no se esté permitiendo el ingreso de alimentos para los reclusos que allí se encuentran. “A ellos se les da a diario la comida que le traen sus familiares además de la que le garantizamos aquí en el comando” aseguró.
Además aseguró estar dispuesto a atender a los familiares quienes deseen información de los presos.
El Nacional.
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